La historia da inicio en el año de 1986, y se lleva a cabo en Irán, cuando el periodista francés-iraní Freidoune Sahebjam (personificado por Jim Caviezel) tiene un desperfecto mecánico en su carro y al llegar a un pequeño pueblo para que se lo arreglen, se encuentra con Sahra (Shohreh Aghdashloo), una mujer que se da cuenta que él es un periodista y, a escondidas de los demás, le cuenta la terrible historia de su sobrina, Soraya.
Soraya (Mozhan Marnò) está casada con Ebrahim (David Diaan), con quien tiene dos hijos y dos hijas. Pero Ebrahim se ha enamorado de una chica de 14 años de edad y para divorciarse de Soraya tiene que darle una especie de herencia, la cual él se niega a brindar, de tal manera que, de una manera fría y calculadora, maquina una forma de deshacerse de Soraya: la acusa de adulterio, un delito grave bajo la religión islámica, para lo cual el castigo es la muerte por lapidación.
En este punto es fácil para el espectador comprender que las mujeres iraníes no tienen voz ni voto en las decisiones grandes de su país, así como también puede establecer y ser testigo de la injusticia llevada a sus máximas consecuencias.
En un país donde la vida de los ciudadanos y el accionar del gobierno están supeditados a una religión, con sus preceptos antiguos y violentos, llenos de ignorancia y prejuicios, no puede resultar nada bueno. Un país donde el laicismo está ausente, el atraso en la educación y en las relaciones sociales es evidente.
Y de esto es lo que trata «La lapidación de Soraya M.», (conocida en español como «La verdad de Soraya»), producción estadounidense que vio la luz en el año 2008, y cuyo guión está basado en el libro que escribió Freidoune Sahebjam, «La Femme Lapidée».
Este largometraje también aborda esencialmente la injusticia inclinada en contra de la mujer y su ausencia de derechos.
Si el Islam justifica el asesinato (como también lo hace el antiguo testamento de la Biblia), y si esta religión es seguida de una manera fundamentalista por muchas personas en el mundo, podemos decir con tristeza que la violencia no tendrá fin.
La escena de la lapidación es tan real que me parece que nadie puede quedarse indiferente ante tal acto de bestialidad.
Las actuaciones son exquisitas, sumamente creíbles, dignas de ser premiadas en cualquier gran festival de cine. Y la música es muy importante y bella en la historia. Pero lo principal es que su realismo conmueve y nos sensibiliza ante un problema de machismo, de brutalidad y de muerte con tortura que aún se sigue empleando en varios países islámicos fundamentalistas.
Los dejo con un avance de la película.
Texto:
Óscar Perdomo León
Esta reseña originalmente fue publicada en LA CINERATA
LA CASA DE ÓSCAR PERDOMO LEÓN. Haciendo uso de mi libertad de expresión. El Salvador, en la América Central. Publicación cada martes. (Y en ocasiones, podrán encontrar dos publicaciones por semana). 
Excelente película, muy fuerte, brutal!! que nos permite ver el horror que viven las mujeres iraníes
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Muchas gracias, Alejandrina, por dejar su comentario.
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Vi la Pelicula y me emociono hasta las lagrimas,lo triste es la violencia que ejercen los cobardes hombres ,en todo el Mundo.
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No todos los hombres, Graciela, pero algunos sí.
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Me hizo acordar del dolor de Antígona. porque el autoritarismo depreda los derechos de las mujeres. Disfruté con las actuaciones de los personajes de la tía y la víctima.La ejecución se me volvió insoportable, por lo verídico.La ví en Filmoteca!!!
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Sí, el realismo de la lapidación es increíble.
Qué interesante aporte ha hecho usted con sus comentarios, Mirta Adriana. Muchas gracias.
Un abrazo.
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Y pensar que ésto sigue y quién sabe hasta cuándo!
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Gracias por dejar su comentario, Clarisa Lobp.
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lastimosamente la palabra de la mujer no vale de nada, el poder que ejerce la hombría alli, y hacer justicia con su propia mano es un horror y lo que a sus hijos se les inculca con violencia no hay amor materno muchas veces por parte de los hijos porque hasta los hijos son partícipes de ellos que crueldad
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Es triste oír eso, Namary. Gracias por comentar.
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Esta malo el segundo parrafo, se dice que Soraya esta casada con Ebrahim. Esto es falso ya que el era el alcalde y nunca se casaron. :3
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Gracias por la corrección, Luciano.
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LOS MUSULMANES SON LOS DIABLOS DE LA TIERRA Y UTILIZAN LA RELIGIÓN PARA MANIPULAR A SU GENTE, ESTA RELIGIÓN DEBE DESAPARECER DEL MUNDO, POR ESO HOY DIOS LOS ESTÁ CASTIGANDO Y LOS SEGUIRÁ DESTRUYENDO
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En mi opinión, es la idea de Dios la que debería desaparecer. Pero eso es algo difícil que ocurra, porque las personas tienen tanto miedo a ser mortales y por eso se aferran tanto a la idea de Dios.
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LA PELICULA ME ENTRISTECIO MUCHO YA QUE LA POBRE DE SORAYA NO HAVIA HECHO NADA MALO SOLO PORQUE SU ESPOSO QUERIA A OTRA QUE TRISTE
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Sí, triste, triste. E indignante que todavía ocurran lapidaciones en el mundo. Gracias por comentar.
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triste es por que no se hace valer la ley de la mujer y que lo nombre tenga la voz sin embargo este vídeo nos deja un gran ejemplo para todas las personas .
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Gracias por dejar aquí su opinión, Leslie.
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ESTA RELIGIÓN DEBE DESAPARECER DEL MUNDO, POR ESO HOY DIOS LOS ESTÁ DESTRUYENDO
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En mi opinión, es la idea de Dios la que debería desaparecer. Pero eso es algo difícil que ocurra, porque las personas tienen tanto miedo a ser mortales y por eso se aferran tanto a la idea de Dios.
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