FANTASMAS


A mi padre,

a mi hermano,

a mi hija.

FANTASMAS

.

Fantasmas entran a mi casa

y sobrevuelan mi persona,

siempre tan cercanos

y casi, casi invisibles.

.

Los percibo a los tres

-¡tan fuertes en su presencia!-

cruzando mis ojos y mi pecho.

.

Mas cuando estoy a punto de hablarles,

todos se desvanecen

como niebla golpeada,

viento de nostalgia.

.

No es una queja.

Los espero y los recibo cada día.

.

En las noches cierro los ojos

y los tres se van muy lejos,

pero es sólo un interludio.

Regresan cada mañana,

puntuales, diligentes, afectuosos.

.

Y si acaso un día se marcharan

para siempre

y dejaran de rondar las habitaciones

vacías de mi hogar,

estoy seguro que,

con impuntualidad amorosa,

a los sueños nebulosos de mi árbol mental,

los tres regresarían

ardientemente.

*

Escrito por Óscar Perdomo León.

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