EL EXTERMINIO DE ROQUE DALTON

Este día tenemos en mi blog la colaboración de Danilo Colindres, quien nos trae un interesante artículo de opinión que reflexiona sobre el artículo Vladimir, el Vaquerito , escrito por Álvaro Rivera Larios y publicado hace poco en El Faro .

EL EXTERMINIO DE ROQUE DALTON

El 30 de Octubre del corriente año, Álvaro Rivera Larios escribió en El Faro el artículo “Vladimir, el Vaquerito”, un novedoso enfoque del exterminio de Dalton: al arrojar nueva luz sobre las razones, circunstancias y causas que desembocaran en el asesinato de uno de los mejores poetas que esta patria esmirriada haya parido, ha descubierto que la tragedia podría bien repetirse interminablemente en nuestra historia.

Primero nos invita apreciar al Vaquerito (uno de los responsables del magnicidio), de manera novedosa, desafiante y de consecuencias antes insospechadas, como a un arquetipo viviente, amenazante, aunque en estado latente en la actualidad:

“Veámoslo ahora como un personaje que arrastra connotaciones simbólicas. Ya no lo veamos como un accidente, como alguien que se fue con sus desvíos a la tumba, veámoslo como el producto de una circunstancia y como la encarnación de unos valores. Manejemos la hipótesis de que existía un mecanismo social enterrado, oculto, innombrado, que facilitó la aparición del Vaquerito, de Rogelio Bazzaglia, de Mayo Sibrian, etcétera.” (Estos últimos dos, autores de otros asesinatos durante la guerra.)

Nos parece que Álvaro se ha precipitado en hacer comparaciones entre estos tres casos. Existen diferencias esenciales y al examinarlas nos daremos cuenta que cada caso expresa causas y consecuencias particulares.

Mayo Sibrian sufría de paranoia, era un psicópata, no era normal y asesinó a muchos y todo tipo de personas, líderes locales y población en general. Ni el Vaquerito ni Rogelio sufrían enfermedades mentales ni sus ejecuciones fueron masivos: asesinaron cada uno de ellos a un líder individual de envergadura nacional de sus respectivas organizaciones: a Roque, potencialmente un líder del ERP y a Mélida, líder fundadora de las FPL.

El caso de Rogelio (colaborador de Cayetano Carpio, uno de los líderes de las FPL) también es diferente al del Vaquerito: en el sigilo de la oscuridad, a espaldas de otros líderes, planeó el asesinato de Mélida Anaya Montes: en nombre de una facción eliminó por conveniencia política a uno de sus líderes por no compartir visiones estratégicas de lucha revolucionaria. Este caso ya ha sido llevado al teatro por Sartre en “Manos Sucias” para el interesado en conocer los intríngulis y mecanismos de este tipo de asesinatos, en las que una minoría, incapaz de persuadir a la mayoría de los otros líderes de la organización, se subleva y pretende cambiar el curso de las acciones, imponiendo su particular visión estratégica, por el asesinato político.

Y he aquí la diferencia entre estos dos exterminios: la mayoría violenta de los  líderes del ERP se decide –en audiencia (naturalmente restringida por la clandestinidad), en un juicio que permitió intercambios entre las partes- a favor del exterminio de Roque, de planteamientos más políticos. En cambio, como ya lo expuse en el párrafo anterior, una minoría violenta de las FPL, que se siente injustamente excluida por una mayoría política, negociadora y moderada, dirime sus diferencias eliminando al líder de esta.

Cuando la mayoría extermina a un individuo le realiza previamente un juicio, donde se le desvaloriza si es que el acusado persiste en ir contra la mayoría, como el ERP a Roque, la sociedad ateniense a Sócrates, La Santa Inquisición a los herejes y blasfemos, etc. El ERP de inmediato se hizo cargo del ajusticiamiento e hizo públicos sus razonamientos. En cambio, cuando la que elimina es una minoría, se saltea el juicio y actúa bajo la oscuridad de la noche y mantiene los argumentos secretos o del exclusivo conocimiento de los amotinados o subversivos. No se hace cargo del exterminio. Lo niega hasta que los hechos la contradicen. El de Rogelio a la Comandante Ana María de las FPL.

No es cierto que por intelectual Roque fue desvalorizado y luego exterminado. Es que las ideas de Roque colisionaron con las del liderazgo del ERP: fue un choque de ideas y visiones y la visión de la mayoría se impuso a la visión del individuo poeta a quien se le señaló de representar peligro para el bienestar de los salvadoreños o al proyecto revolucionario. El Vaquerito lo agarra a patadas y le grita intelectual cobarde: en realidad le recrimina por ser intelectual inconsecuente, contra-revolucionario. Lo odia y entonces le teme por pensar diferente.

Ocho años después de su crimen, Rivas Mira, y los otros todavía vivos que decidieron eliminar a Roque, se justificarían aliviados argumentando que si dejaban vivo al poeta, este, como representante de una minoría, se las desquitaría asesinándolos como Rogelio Bazzaglia a Mélida Anaya Montes. No lo creo: Roque como representante de la izquierda política moderada resolvía problemas persuadiendo; Rogelio, extremista, eliminando.

Si quieren saber cómo la mayoría se impone al individuo excepcional y termina exterminándolo porque se resiste y se atreve a pensar -no necesariamente a actuar- diferente a ella, hay que leer el juicio contra Sócrates en las obras de Platón. Y es que Roque como Sócrates sería siempre la minoría en cualquier grupo o movimiento al que perteneciese.

La tiranía de las mayorías contra el individuo excepcional y diferente: no es solo un problema actual de las organizaciones políticas de izquierda: es uno de los grandes desafíos de cualquier democracia, bien constituida o en ciernes como la nuestra.

La tentación de justificar medios violentos e ilegítimos para lograr fines deseables no desaparece por arte de magia en una democracia. Si no me creen vean la destrucción ordenada por la jerarquía católica de la pieza artística que adornaba la fachada de la catedral metropolitana aduciendo que atentaba contra la vida de la mayoría de feligreses. (En defensa de Monseñor Escobar, debemos agregar que pidió disculpas al artista por no haberlo tomado en cuenta antes de dictaminar la destrucción de su obra.)

Debiera ser crimen de lesa humanidad exterminar o aislar socialmente a una persona solo porque piense diferente. Las ideas motores que hacen la diferencia en la historia de los países siempre las anticipan individuos que provocan escándalo y no los que han sudado la camiseta, o los convencidos de siempre o grupos o sociedades de reconocido prestigio social y/o político. La “chispa divina” es propiedad de individuos, no de agrupaciones ni mayorías.

Texto:

Danilo Colindres

El artículo al que se refiere Colindres  todo el tiempo aquí es: VLADIMIR, EL VAQUERITO. Escrito por Álvaro Rivera Larios.

LECTURA DE LA BIBLIA

 
 Este día tengo como invitado a Danilo Colindres, quien de una manera breve nos plantea su punto de vista con respecto a la lectura obligatoria de la Biblia en las escuelas.

 LA LECTURA DE LA BIBLIA

 La lectura de la Biblia fue vetada por el presidente aduciendo -como lo esperábamos- inconstitucionalidad. Me temo que esa solo fue la excusa de su rechazo: la verdadera razón: presión de la iglesia católica y el desinterés “interesado” de su partido, el FMLN.

La iglesia le teme a la vulgarización de la Biblia por dos razones:

1- Para ella el Libro es sagrado y no puede leerse como se leería una novela, ni siquiera “Don Quijote.” En realidad dirán- leerlo sin su tutela es rebajarla, denigrarla, tratarla como un libro más, aunque se le reconozca “sabiduría excelsa o milenaria.” Es que para ella no es sabiduría sino La Verdad Absoluta como Misteriosa. Si se han dado cuenta, ninguna denominación religiosa en el país se quejó que su Libro o su Texto Sagrado fuese “despreciado” por los diputados: estas denominaciones también se consideran intérpretes de La Verdad, y en eso no se diferencian de las autoridades católicas.  

2- Un razonamiento riguroso y humanista descubriría la falta de sabiduría de la Biblia y sus contradicciones y limitantes históricas.

3- Aceptar que los laicos podemos leer la Biblia sin su tutela es aceptar la posibilidad de que Dios se comunique directamente con el individuo: una idea “demasiado protestante para ser buena.”

4- ¿Qué entonces ofrece la Biblia como para que yo haya apoyado su libre lectura en las aulas? Mi individualismo es afín a la idea protestante de la comunión directa con el Creador. La Biblia es un documento poético donde están planteados los problemas existenciales éticos fundamentales. Además, lo que a la iglesia le parece un peligro: su carácter histórico, temporal, no eterno, me parece a mi uno de sus mejores tesoros: te enseña que las conductas y creencias socialmente aceptadas son cambiantes.

Texto:

Danilo Colindres Uceda

Fotografía extraída de:

http://search.babylon.com/imageres.php?iu=http://sigosinsabernada.files.wordpress.com/2010/01/biblia.jpg&ir=http://sigosinsabernada.wordpress.com/2010/01/08/para-poder-entender-la-biblia/&ig=http://images.google.com/images?q=tbn:YSy_1xQ41zgc-M::sigosinsabernada.files.wordpress.com/2010/01/biblia.jpg&h=768&w=1024&q=la biblia&babsrc=home

EL JUICIO CONTRA ROQUE DALTON

Han pasado más de dos meses del aniversario número 75 del nacimiento de Roque Dalton y 35 años de su asesinato. Pues bien, hoy tengo como invitado en LA CASA DE ÓSCAR PERDOMO LEÓN a mi amigo Danilo Colindres, quien plantea que la muerte de Dalton fue debido a la intolerancia, intolerancia que aún impera en nuestra desangrada sociedad salvadoreña.

Al final expongo yo mis propios puntos de vista sobre lo escrito por Colindres. He aquí pues el interesante artículo que me hizo llegar mi amigo.


EL JUICIO CONTRA ROQUE DALTON

Al poeta se le realizó un juicio en el que fue hallado culpable por una organización político-militar que participó en la guerra contra la dictadura de El Salvador. ¿Fue entonces un asesinato, un homicidio, o qué?

En primer lugar debemos conocer de qué fue encontrado culpable y si los jueces que lo juzgaron lo hicieron a través de un juicio con oportunidad de defenderse del acusado. Todo indica que se defendió y perdió su juicio. Sin embargo: ¿qué pruebas se presentaron? Y los que lo juzgaron: ¿qué competencias jurídicas o profesionales tenían para ejercer de jueces en el proceso? ¿Qué les permitió a estos “jueces” valorar las pruebas? ¿Qué oportunidad tuvo Roque de presentar su caso con otras pruebas? ¿Quiénes fueron los que la hicieron de jueces? ¿Existían estatutos del ERP que contemplaran como proceder en casos como el de Roque? ¿Qué podemos saber de todo esto?

Digamos, como hipótesis inicial, que todo se llevó a cabo con cierta mínima legalidad y legitimidad de una organización subversiva y dentro de los límites de la época y de las circunstancias. Entonces estamos hablando de un crimen por equivocación: se le imputaron faltas graves y sus jueces lo sentenciaron a muerte no de mala fe sino porque que el castigo correspondía a las faltas (de acuerdo a unos estatutos conocidos por todos) o que su indisciplina a repetición inducían a pensar que Roque era incorregible y ponía en riesgo de muerte a todas las personas miembros de la organización. También se podría conjeturar que el clima de clandestinidad precipitó el juicio restándole importancia a la calidad de las pruebas, y limitando la defensa casi exclusivamente al poder de persuasión del mismo Roque que fracasó en su intento de salvarse.

¿En qué se equivocaron entonces sus jueces? No fueron suficientemente flexibles por un lado, sobrestimaron el peligro que representaban las faltas del poeta o no soportaron el dominio abrumador que ejerció el poeta en su defensa. ¿Si podía persuadirlos tan fácilmente a ellos como no convencería a sus subalternos “menos preparados” si llegase a dirigirles la palabra?

Esta versión, sin embargo, no es compatible con la razón que dieron sus jueces, los dirigentes del ERP, de su sentencia y ejecución: lo acusaron de ser colaborador, espía de la CIA, contrarrevolucionario. ¿Por qué dieron esta excusa tan absurda como insostenible? Absurda e insostenible para los que ya conocían a Roque Dalton pero fácil de tragar por sus subalternos, las bases, los subordinados que del poeta apenas conocían y para quienes el arte es el oficio de pequeños burgueses vagos e inmaduros, que hay que someter en bien de La Revolución.

Si se había decidido “eliminarlo” ¿Por qué no inventar una justificación que si bien provocaría la separación –para entonces inminente- de unos cuantos lideres (Ferman Cienfuegos, Lil Milagro Ramírez), convocaba poderosamente a sus cuadros seguidores (los de choque, los imprescindibles) a unirse aun más por la sangre derramada de un traidor desconocido?

Se había decidido eliminarlo por peligroso y se aprovechó la coyuntura para acusarlo de una falta grave imperdonable: ser enemigo activo y entrenado de La Revolución. La única, dicho sea de paso, que justificaba su eliminación sin contemplaciones. Porque si se le acusaba de comportamiento riesgoso para todos, entonces ¿Por  qué no solo expulsarlo de las filas y dejarlo libre de incorporarse a otras organizaciones más tolerantes con el perfil mental del poeta, como la RN, que ya se encontraba escindiéndose del ERP?

En otras palabras, el objetivo de la justificación pública de la ejecución del poeta no era únicamente para cohesionarse. En realidad era la única que justificaba su muerte sin lugar a dudas. Y como todos sabemos: una justificación infundada. A la voluntad de matar se le buscó y adecuó la mejor justificación porque nunca existió una verdadera justificación.

En conclusión: el crimen contra Roque Dalton no fue un crimen de equivocaciones sino un crimen por intolerancia, muy parecido al crimen cometido contra Sócrates, acusado en su tiempo de corromper la juventud ateniense.

Agreguemos a la discusión lo que conocemos de la coyuntura de ese momento: la organización político militar estaba en crisis y se vislumbraba la escisión que terminaría con la unidad. Roque simpatizaba y propugnaba por un nuevo enfoque político militar que suponía una amenaza para los dirigentes de ese momento, que actuaron de jueces contra el poeta, cuando en realidad eran partes.

La sociedad ateniense condenó a Sócrates. Una organización político-militar condenó a Roque Dalton. Los dos condenados fueron vistos como amenazas a sus organizaciones. ¿Qué perdían los atenienses o los del ERP con dejar libres a sus acusados? A Sócrates se le pudo prohibir de pregonar sus enseñanzas “malévolas.” ¿Y a Roque? Que siguiera su camino por otro lado, con otra organización. Pero no: si no estaba con ellos era un traidor, enemigo de La Revolución y de El Pueblo Salvadoreño. O estaba equivocado Roque o ellos y ellos no podían estar equivocados.

¿Cómo enjuiciar a los intolerantes –buenas y dóciles gentes por lo demás- que a la menor oportunidad dirigen furibundos el dedo acusador contra aquellos que se diferencian de ellos, aquellos a quienes no comprenden, aquellos que se atreven a ser distintos siendo incapaces de ser como “todos”, aquellos que al fin y al cabo impiden que las sociedades u organizaciones se estanquen, aquellos cuya visión y, por tanto valores, y energía o voracidad evolutiva ponen en entredicho las costumbres e ideas dominantes en una sociedad que entroniza a la mayoría por sobre las minorías, la sociedad, la organización sobre el valor irreducible de la persona?

Danilo Colindres

***

Sobre tu artículo “EL JUICIO CONTRA ROQUE DALTON”

Estimado Colindres:

Quiero decirte que estoy de acuerdo con tu visión y comparación de Dalton con Sócrates, debido a que ellos dos representaban para la sociedad seres fuera de serie, que no podían ser contenidos, amarrados u obligados a seguir el camino de las ovejas, como a la mayoría de seres humanos. En todo esto me gusta mucho que hayás usado la palabra “intolerancia”.

Sin embargo, pongo en duda algunas de tus afirmaciones, como:

1-“…se le realizó un juicio…”

2-“Todo indica que se defendió y perdió su juicio.”

Bueno, con respecto al inciso número 1, te pregunto: ¿Fue un verdadero juicio? Porque un juicio supone jueces, abogados defensores (o al menos que el acusado pueda defenderse con libertad) y que se lleve a cabo un proceso justo. ¿Existieron estos elementos en los sucesos de Dalton? Creo que la palabra juicio, con todas las de la ley, le queda muy grande a los hechos relacionados a los días previos al asesinato de Dalton.

En cuanto al inciso 2, no dudo que haya habido intercambio de palabras entre Dalton y sus asesinos, pero eso no implica juicio, eso no implica que las palabras de Dalton hayan tenido algún peso para ser evaluadas.

A mi manera de ver, lo que le hicieron a Dalton fue algo más oscuro, más tenebroso y corrupto. Yo creo que el sólo hecho que después de su asesinato, Alejandro Rivas Mira, el principal implicado, haya huido de El Salvador, robándose todo el dinero de una extorsión, te dice el tipo de persona que era. ¿Será que después de ejecutar a Dalton, Rivas Mira cayó en la cuenta que ese grave asesinato no se iba a quedar escondido, ni a nivel nacional ni a nivel internacional y esto le iba a perjudicar mucho? Su conducta no parece la de un revolucionario al estilo del Che, en quien todas sus acciones iban destinadas a concretar la revolución (que supuestamente mejoraría la vida en general de los más desposeídos); por el contrario, su conducta se parece más a la de un ladrón y un criminal. Y con gente así es difícil, sino imposible, realizar un juicio de verdad.

Óscar Perdomo León.

Fotografías de Roque Dalton extraídas de: http://web.ecomplanet.com/BOSC9720/ServerContent/MyCustomImages/BOSC9720CustomImage22367.jpg
http://lahistoriadeldia.files.wordpress.com/2009/08/roque-dalton.jpg

LA PRENSA GRÁFICA Y SUS LÁGRIMAS DE COCODRILO

Este día LA CASA DE ÓSCAR PERDOMO LEÓN tiene de invitado a Danilo Colindres, quien tiene su opinión sobre los sucesos recientes sobre el fotoperiodista que congeló con su cámara fotográfica los momentos de violencia en que un estudiante asesinaba a otro sólo para robarle su camiseta y mostrarla como trofeo. Este hecho ocurrió justo cuando en El Salvador hay más o menos 14 muertes diarias por violencia y se discute si se juzga o no a los menores como adultos.

Nadie en su sano juicio está criticando o enjuiciando al periodista que tomó las fotos de la discordia. Es más que evidente que éste no tuvo nada que ver con el hecho de violencia registrado ni con su publicación en el rotativo: la decisión la tomó el equipo de editores y los dueños del medio. A estos es a quienes la Jueza ha puesto en investigación y ordenado que dejen de publicar -no las acciones y los cuerpos de los implicados, sino las caras de los mismos.

Los dirigentes de LA PRENSA GRÁFICA (LPG) fustigan y continuamente claman porque se haga justicia contra los delincuentes; pero cuando ellos son enjuiciados por quebrantar la Ley, son los primeros en llorar y quejarse de lo intolerable de enfrentarla. Y a Uds. señores editores y propietarios: ¿quién los fiscaliza?

Queridos lectores: todos estamos bajo la sombrilla de la Ley. Ninguna jueza ha ordenado que cierren el medio de comunicación. Si tanto defienden el concepto de la Ley, ¿por qué no aceptar que pudieron haberla infringido y que por lo tanto son también susceptibles de ser llevados a un juicio por ello, donde también contaran con la posibilidad de defenderse con todos los argumentos plausibles que quieran? Si a la jueza Ponce le pareció que había razón de enjuiciamiento, entonces tenía el deber de girar las respectivas instrucciones. Y estas instrucciones no son de carácter penal ni mucho menos. Es una demanda con implicaciones civiles nada más.

Ayer estos mismos medios alegaban que ellos no podían estar bajo la Ley Penal. Hoy tampoco quieren ser objeto de demandas civiles. Y entonces ¿qué defensa podemos tener nosotros los ciudadanos corrientes ante el poder absoluto que demanda el cuarto poder, el poder mediático?

LPG además ha recurrido a buscar apoyo “popular” entre todos los miembros de su equipo de redactores. Todos ellos aparecen en una fotografía apoyando a sus editores y dueños que son los verdaderos responsables de que se abusara contra el menor infractor. ¡Qué descaro! Si ellos son sus empleados, sus súbditos, que por fuerza temen ser despedidos por sus jefes. ¿Por qué no pedirles su opinión anónima? Mientras haya una amenaza sobre sus cabezas ningún empleado osará contrariar los deseos de su patrón.

¿Por qué no someterse al juicio y afrontar a la jueza sin andar tras el apoyo del pueblo azuzándolo a su favor o escudándose en periodistas que nada tuvieron que ver con la publicación de la noticia vendedora?

Cumplamos con la Ley pero todos sin excepción y especialmente aquellos que gozan de ser lideres de opinión, de ser lideres de la sociedad, de ser dirigentes, de poseer poder por encima de la mayoría de nosotros, de pertenecer a la clase influyente. Que demuestren con argumentos que no han cometido falta, ante personas entendidas y no ante un pueblo intimidado y a merced del cuarto poder. Señores de LPG: basta de lágrimas de cocodrilo, sean valientes y transparentes, salgan, den la cara que ahora esconden detrás de periodistas diligentes e inocentes que nada tienen que ver con los supuestos abusos por lo que se les acusa. Den el ejemplo y digan: “si hemos cometido algún abuso en nuestra labor, aquí estamos para aceptar nuestra responsabilidad social. Por el momento no nos sentimos culpables y esperamos demostrarlo ante las instancias correspondientes. Nosotros no tememos a la Ley: la defendemos y nos sometemos con confianza a su Imperio.”

Texto:
Danilo Colindres

Breve nota de opinión: yo personalmente, como Óscar Perdomo León, creo que ya no deben esconderse los rostros de los asesinos, no importa si son menores o adultos.

Fotografía extraída de La Prensa Gráfica:

http://www.laprensagrafica.com/el-salvador/judicial/100875-encarcelados-.html

Shaw y su Galatea: a Propósito de la Educación

Este día La CASA tiene nuevamente un invitado. Hace varias semanas que había estado yo “presionando y molestando” a un amigo para que escribiera algo referido a George B. Shaw, porque sé que es uno de sus escritores favoritos; él me respondía que sí, pero en realidad había estado dándole largas al asunto. Este día mi amigo me ha mandado el siguiente comentario, el cual se inspiró, según me relató él, en LA NOTA DEL DÍA de El Diario de Hoy. Me refirió además que él difiere de lo escrito en el mencionado periódico. Mi invitado de hoy se llama Danilo Colindres, es Doctor en Medicina y Licenciado en Economía. Le doy la bienvenida a LA CASA de Óscar Perdomo León y espero que no sea la última vez que nos visite. Leámoslo entonces.

Shaw y su Galatea: a Propósito de la Educación

El escribidor de LA NOTA DEL DIA (12 de enero de 2010) del Diario de Hoy (EDH) demuestra su ignorancia del dramaturgo George Bernard Shaw al utilizarlo a la ligera para ventilar su indignación a la acerbas criticas que ha sido objeto el líder demócrata del senado estadounidense por decir éste en publico que “Obama en parte debe su triunfo a que habla como político culto, avezado, que se dirige a toda una nación, no solo a una etnia.”

Es cierto que Shaw observó que la forma de hablar separa a unos grupos sociales de otros. Pero para Shaw estos grupos se separan artificiosamente -en apariencia- y por esta razón es que Higgins (el ilustre profesor de fonética en la obra de teatro escrita por Shaw) se aventura presuroso a apostar a que puede enseñarle a la vivaracha violetera (la Galatea de Higgins) a hablar –pronunciar- tan apropiadamente como lo hace un noble y/o aristócrata de su tiempo y hacerla pasar como una mas de ellos.

Es cierto que no sólo hay que cuidar la forma sino el contenido de las conversaciones. Pero no es cierto que Higgins se dedica a cultivar su Galatea, instruirla en historia, hacerle leer literatura como lo asegura el escribidor que concluye afirmando que la Galatea de Shaw es una “obra perfecta e insuflada de carácter divino” (sic) y que un apuesto y refinado joven la enamora y conquista. Olvida mencionar el escribidor que “la conquista” un caballero inglés incapaz de hacer nada en la vida que no sea mantener las formas apropiadas del comportamiento aceptadas en la “buena sociedad.”

Dice el escribidor que “la manera de hablar es obviamente reflejo de la educación que se tiene…” cuando GB Shaw pretende mostrar que las apariencias engañan: si se le enseña a pronunciar bien a una persona sin educación puede pasar fácilmente como una persona culta porque, las clases “educadas” no son tan educadas como fuese deseable aunque sean unos expertos en guardar las formas ocultando su ignorancia, incapacidad, su desidia e indolencia. El punto fundamental de Shaw era que una persona educada para producir mucho dinero no es ni la más educada ni la mas idónea para dirigir los destinos de un país moderno. El ricachón es tan inútil y perjudicial para gobernar como un indolente de modales impecables o un demagogo encantador (no afirmo que Obama lo sea.)

Al final la Violetera callejera de Higgins, a quien éste maquilla de princesa, termina dirigiendo una floristería en Londres, feliz de vestir a su inútil marido quien la querrá por el resto de sus vidas. Son más dañinas socialmente las personas con exceso de mala educación que las personas sin educación. Estimados lectores: no han existido grandes pensadores que no se hayan tenido que purgar de todo lo que les ha enseñado e impedido ver la realidad tal cual, incluyendo a Jesucristo, que desde niño se tomó la molestia de corregir a los sabios de su tiempo. Y los puso en tantos aprietos que no tuvieron más remedio que crucificarlo. Permaneció, sin embargo, su eterna sentencia: sepulcros blanqueados.

Texto:

Danilo Colindres

ANEXO

HABLANDO DE SHAW en fotografías

Colindres citando de memoria a George B. Shaw

Leyendo a Shaw

El artículo de El Diario de Hoy al que se refiere Danilo Colindres se titula: “Obama, Reid, el hablar culto, Pigmalión y dos Galateas” y para los que quieran leerlo, lo pueden hacer siguiendo este enlace:

http://www.elsalvador.com/mwedh/nota/nota_opinion.asp?idCat=6342&idArt=4418551

Las imágenes de George Bernard Shaw fueron extraídas de:

http://images.google.com.sv/images?q=George%20Bernard%20Shaw&oe=utf-8&rls=org.mozilla:es-AR:official&client=firefox-a&um=1&ie=UTF-8&sa=N&hl=es&tab=wi

Las fotografías de Danilo Colindres y de Óscar Perdomo León fueron tomadas por Mariana Soledad Guardado Valencia.

POEM from my friend

Mi amigo y colega Danilo Colindresrecibió una noticia de alguien muy cercano que lo dejó pensando en la Verdad. Así que Colindres escribió un poema y me lo envió.“Te mando dos estrofitas en inglés…” Y me contaba Colindres que cuando ha intentado escribir poesía inmediatamente la piensa en inglés.

Leamos.

MY REACTION TO “NEWS FROM BRO.”

Oh reason, I hate thee!
You and only you slash
with no pity
chivalrous knights.

A relentless job
once upon
your barren lands:
a dedalus
of soothing paths.

¿Encaramos la Verdad o la eludimos? Sí, la Verdad, así con mayúscula. A veces la Verdad puede ser tan corrosiva, tan hiriente, que le damos la espalda y nos volvemos sujetos drogados y ciegos ante la realidad. Otras veces, por el contrario, nos volvemos valientes y la enfrentamos con el pecho abierto.Su poema es una crítica a la posición que asumen algunos cuando se estrellan contra un hecho irrefutable.

Colindres y yo leyendo.
Y he aquí mi humilde traducción del poema de Colindres:

MI REACCIÓN A “LAS NOTICIAS DE MI HERMANO”.


Oh razón, ¡cuánto te odio!
Vos y sólo vos apuñalás
sin lástima
a los hidalgos caballeros.
Un trabajo implacable
una vez
sobre tus áridas tierras:
laberinto
de sedantes caminos.

Texto:
Óscar Perdomo León

Fotografías:

Mariana Guardado y Óscar Perdomo León.

ANALIZANDO OPINIONES INDEPENDIENTES SOBRE LA CRISIS DE HONDURAS

La CASA de ÓSCAR PERDOMO LEÓN es una tribuna abierta a las opiniones.
Creo firmemente en la diversidad de ideas y en la tolerancia; así que este día le he abierto la puerta a un invitado. Gracias por la visita, amigo. Espero que no sea la última vez que vengás por aquí.

El siguiente artículo de opinión fue escrito por mi colega Danilo Colindres.
Los gemelos Samayoa se han abstenido de condenar categóricamente el golpe de estado en Honduras.

Joaquín se ha decantado por la derecha política aunque nadie en su sano juicio diría que representanta una derecha recalcitrante o radicalizada. Me atrevo a decir que está a la derecha de Escobar Galindo, el pensador de derecha mas ecuánime con que cuenta El Salvador.

¿Por qué lo aseguro? Porque se ha ubicado sin ambages del lado de la bandera retórica que alza la derecha latinoamericana contra el “demonio” chavista en la región.

En un artículo aparecido en La Prensa Gráfica llegó al colmo de escribir que el aislamiento de Honduras –posterior al golpe- era el precio que tenían que pagar los hondureños por atreverse a desafiar –expulsando a Zelaya- al expansionismo chavista en la región. ¡Ni los golpistas hondureños lo podrían haber dicho mejor!

Sigamos: el gemelo Salvador ha escrito en El Diario de Hoy que todos los países que han condenado el golpe “han ignorado o distorsionado el contexto político del conflicto…” para luego terminar elogiando al presidente Funes por mantener el bajo perfil que este ha guardado en el conflicto y que corresponde a nuestra muy particular relación con la hermana republica de Honduras. Fíjese el estimado lector que Salvador no critica que el presidente haya condenado el golpe de estado, como éste lo ha hecho de manera tajante.

Joaquín Villalobos en cambio no es tan temeroso como el gemelo Salvador. Dice en su articulo en El Diario de Hoy: “un golpe de estado es negativo por si mismo…” Continua este señor diciendo que lo que se necesita es “una política de mediación que ayude a la reconciliación entre los hondureños y no acciones supuestamente diplomáticas que contribuyan a la confrontación…” ¿A que se refiere J. Villalobos con estas acciones confrontativas?: a la expulsión de Honduras de la OEA, al acompañamiento del presidente de ésta y otros presidentes que brindaron a Zelaya en su intento por retornar a su país, al cierre de nuestras fronteras.

Estimado lector: ¡hoy todos están a favor del dialogo! ¿Por qué cree usted que lo están? Sencillo querido lector: porque no hay vencedores ni vencidos. Escobar Galindo lo ha repetido hasta la saciedad: El Salvador llegó a los Acuerdos de Paz porque la vía de la fuerza fracasó. En Honduras usaron la fuerza para expulsar a Zelaya. Este fue vencido por la fuerza. ¿Cómo se restableció el equilibrio que potenció el diálogo con mediación del presidente Arias de Costa Rica y con el decidido apoyo de los EUA? Con medidas de fuerza diplomática: la expulsión de la OEA y la condena de la ONU, el cierre de las fronteras, el inminente retorno de Zelaya acompañado de personas distinguidas imposible de ningunear. En resumen: por las acciones de confrontación que tanto deplora Villalobos.

Este sabe, sin lugar a dudas y por propia experiencia, que sin presión no hay dialogo y que aquella por naturaleza es confrontativa. ¿Por qué deplora entonces Villalobos las mismas medidas que han presionado hacia el dialogo que tanto encomia? ¿Por qué los gemelos Samayoa no han condenado abiertamente el golpe?

De Joaquín el gemelo no hay dudas: nunca ha militado en la izquierda y además es un alto ejecutivo de FEPADE, un tanque del pensamiento técnico de derecha progresista, parte del establishment de derecha salvadoreña, independiente –y hasta crítico- de la política partidaria mercantilista y de privilegios de ARENA.

Del gemelo Salvador y Villalobos podemos decir –si somos maquiavélicos- que no desean afligir, asustar, ofender o predisponer en su contra a los poderes fácticos de El Salvador, tradicionalmente timoratos y conservadores, que en las próximas elecciones pudieran apoyarlos –o no estorbarlos- en sus intenciones presidencialistas. O si decidimos darles el beneficio de la duda, se trata de verdaderos líderes de opinión y presidenciables porque son responsables con sus palabras, realistas y finos diplomáticos, reacios a poner en peligro el delicado equilibrio que requiere el proceso político de cambios moderados en El Salvador.

Texto: Danilo Colindres
Fotografía: Óscar Perdomo León