DÍA DEL MÉDICO 2020

Soy doctor en medicina. Todas las demás actividades que hago, como escribir libros o hacer música, son satélites felices que giran alrededor del planeta medicina. Me veo a mí mismo en el espejo y en verdad me gusta ejercer mi profesión.

Tengo muchos recuerdos, buenos y malos, de todos los años que trabajé en diferentes hospitales del país. Siempre vi nosocomios, por un lado, llenos de pacientes; y por el otro, con insuficiente cantidad de médicos para atender, como se debería, a los pacientes. Y aun así, con tanta carencia, con tanta escasez que ha sido como una tradición malsana en nuestros hospitales, siempre vi a muchos médicos entregarse a su trabajo con un corazón grande y elástico, los vi haciendo el bien más allá de sus obligaciones.

Muchas veces me molestó la arrogancia de algunos médicos, pero si lo pienso bien, la mayoría hacían su trabajo con humildad y con entrega sincera.

Hoy, en este aciago año 2020, el gremio médico está de luto. Muchos médicos salvadoreños han muerto debido a la infección de Covid-19. Y los que quedan vivos, no han tenido tiempo de llorar por sus colegas, porque trabajan muchas horas y viven bajo riesgo todo el tiempo.

Esta pandemia nos ha golpeado fuerte, pero estoy seguro que ha sacado también lo mejor de aquellos doctores que ejercen con amor y vocación su carrera.

Este 14 de julio, Día del Médico, les mando un abrazo solidario a todos los galenos. Y los invito a mantener vivas, a pesar de este tiempo tan oscuro, la esperanza y la alegría.

Escrito por

Óscar Perdomo León.

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