
Una de las partes más conmovedoras del libro cuando Dostoievski, quien se reunía con un grupo de escritores e intelectuales para hablar sobre las nuevas corrientes de pensamiento de Europa, fue acusado de conspirar contra el Zar y la aristocracia de siglo XIX, y fue entonces acusado de atentar contra “el gobierno y la religión”.
He aquí un breve fragmento del libro en cuestión:
“La primavera se anunciaba fría. La larga caminata en esa ciudad de sombras lo devolvió a su casa, aterido. Se mudó de ropa, tomó un té, se abrigó los pies con un trapo de lana y se metió en la cama. Unos golpes en la puerta lo sobresaltaron. En medio de la oscuridad amortiguada por el suave discurrir de la lluvia, tres enormes orangutanes con uniforme irrumpieron groseramente en su habitación. El 22 de abril de 1849 sus oídos escucharon lo siguiente: «Fiodor Dostoievski queda usted detenido por orden del Zar Nicolás I». Fue entonces llevado a una prisión provisional y luego él y otros más fueron sacados en caravana. Tras 20 horas sometidos al viento helado y la lluvia la caravana hizo un alto. Allí Fiodor recibió de una viuda un ejemplar de las Evangelios. Otra mujer desgastada le puso con disimulo una pequeña botella de vodka en el bolsillo, la cual lo salvaría del frío. Dostoievski dejó por su lado disimuladamente en manos de la mujer de los Evangelios una carta arrugada: «Hermano mío, no estoy abatido, no he perdido el coraje. En cualquier parte la vida es la vida, la vida está en nosotros y no en el mundo que nos rodea. Cerca de mí habrá otros hombres, y ser uno entre los hombres y seguir siéndolo siempre, cualesquiera sean las circunstancias, no flaquear, no caer, ésa es la vida, ése es el verdadero sentido de la vida».»
6 años después de muchas penurias Dostoievski fue liberado. Se casó en dos ocasiones y tuvo hijos. Con los años llegó a ser uno de los escritores más grandes y prolíficos que ha conocido la humanidad.
Este día recomiendo leer el libro Dostoievski, maestro de la mirada psicológica y aprovecho para hacer un humilde homenaje al gran escritor ruso.
Óscar Perdomo León.