Grises anaranjados,
oscuridad reluciente,
ojos imbuidos
en pensamientos felices,
amparo en el amor.
.
Vuela el corazón
sin ataduras
y la muerte que fue repelida
se ha inclinado
hacia otros rincones.
.
Sueña la Bea
con la mirada
psicológica,
sueña
con audaces caminos,
sueña con pétalos
amarillos
y
hierbas moradas.
.
Duerme la Bea
y descansa,
mientras relampaguea
mi amor
en vigilia.
*
Escrito por
Óscar Perdomo León