MARIO ROBERTO PERDOMO LEÓN canta a la edad de cinco años

La negación, la ira, la negociación, la depresión y la aceptación son las cinco fases del duelo. Sin embargo, la mente humana es muy compleja y esas fases a veces no siguen una línea ordenada ni cronológica y se pueden entremezclar.

Apenas este 24 de diciembre falleció mi hermano Mario Roberto. A veces se me viene de golpe la incredulidad y no me acostumbro a la idea de que no volveré a verlo. Crecimos juntos y jugábamos desde niños en la casa familiar.  ¡Cuántos recuerdos!

Quiero compartir con ustedes un video en donde él y yo tratamos de cantar Las mañanitas. Y luego le sigue una grabación de 1972 que hizo mi papá de la voz de Mario Roberto, cuando él apenas tenía la edad de 5 años.

¡Estás siempre en mi corazón, querido hermano!

Para quienes no puedan hacer correr acá en mi blog este video, lo pueden hacer dando un clic AQUÍ.

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(NOTA. A raíz del fallecimiento de mi hermano, traigo a cuenta un recuerdo de algo que escribí hace ya un par de años; para leerlo le pueden dar un clic aquí: DESEOS POST-MORTEM.)

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MI PADRE

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Mi padre había sido ingresado en el hospital y yo, que apenas tenía 7 años de edad, me la pasaba por las noches acostado mirando el techo, fotografiando con mi memoria las manchas en las paredes y lloriqueando como una esponja exprimida, porque, aunque nadie me lo había dicho directamente, sabía -o intuía- que mi padre tenía una enfermedad grave. Él era un hombre joven de apenas 33 años de edad que estando en aparente buen estado de salud había caído de pronto inconsciente al suelo, después de una terrible y repentina cefalea.

Unos días después mi tío Julio me mintió, diciéndome que me llevaría al hospital a ver a mi padre.

-Pero antes vamos a pasar a hacer un mandado –me dijo, mientras el teatro, la alcaldía y la maravillosa catedral de Santa Ana veían al hombre y al niño atravesarse el parque.

Al doblar una esquina, después de caminar un par de calles, vi la funeraria y a toda esa gente de luto. Entramos sigilosamente. El ambiente parecía brumoso. Seguir leyendo «MI PADRE»

REGALOS DE DICIEMBRE de 2019

Este diciembre ha sido agridulce. Pero he recibido varios regalos «musicales» que sé que llevan mucho cariño: un libro para aprender las técnicas de la guitarra clásica, una guitarra Yamaha y una guitarra Fender.
❤️


Infinitas gracias Laura María Perdomo Pacas, Beatriz Perdomo Pacas, Gustavo Andrade, Arecio De León y Mario Edgardo Romero.

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Con respecto a la guitarra Fender me gustaría publicar las palabras escritas por mi hija Laura María:

«Quizás a finales de julio o principios de agosto, Bea me dijo que quería que le compráramos una guitarra a mi papá porque la suya ya no sonaba del todo bien y que se la diéramos para su cumpleaños (el 17 de octubre). Después de eso, medio anduvimos hablándolo más y viendo un par de opciones, pero nada serio, «teníamos tiempo para hallar algo bueno».

«Bea falleció el 03 de octubre y ya no pudo ser parte de la decisión de cuál guitarra elegir, pero quise cumplir su deseo y, para esta Navidad, le regalé esta Fender a mi papá. De casualidad, un día antes de dársela, andaba buscando chongas en el cuarto de Bea y hallé el papelito de la última foto que tiene la letra de una de las canciones de The Beatles («The End»); no sé cuándo ni para qué, pero Bea lo había escrito, así que lo agregué al interior del estuche de la guitarra.

«Me alegra muchísimo haber cumplido el deseo de Bea de hacerle este regalo a mi papá y ver cómo a él le ha gustado y lo ha estado disfrutando. Sé que ella estaría feliz.

«P.D.: gracias, Fran, por ayudarme a encontrar la guitarra perfecta y andar en todas esas vueltas conmigo.»

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MI LINDA BEATRIZ

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Esta fotografía, en donde estoy con mi hija Beatriz, es una de mis favoritas. Aquí ella era una pequeña niña, pero recuerdo que siempre fue muy adelantada intelectualmente para su edad.

Todos tendremos un final algún día. Y Beatriz Andrea Perdomo Pacas se nos ha ido prematuramente a la edad de 20 años. ¡Se me murió mi niña!

Durante su vida nos hizo muy felices con su amor, su sagacidad, sus charlas inteligentes, y sus ocurrencias inesperadas y graciosas.♥️

Acepto su partida inevitable, irreversible, pero -¡puta mierda!- cómo duele esto.

Alguien dijo por ahí que no existe el infierno y estoy de acuerdo con esa persona, no existe ni el cielo ni el infierno. Pero este dolor que tengo en mi corazón y en mi mente es verdaderamente un infierno.

Bea querida:
Me consuela saber que ya no estás sufriendo. Siempre estarás en mi corazón y en mis recuerdos, hija linda.

Óscar Perdomo León

MIS PEQUEÑAS

Cuando les escribo o les digo «mis niñas lindas», es en serio. Porque son bellas y son mis pequeñas que tanto quiero.

Pero no lo digo como un ingenuo que no entiende que ustedes ya son unas mujeres: toman decisiones por sí mismas, tienen su vida social, trabajan, escuchan la música que se les antoja (cuando no estoy con ustedes 😄) y poseen sueños.

Ambas han sido siempre muy buenas estudiantes y muy buenas lectoras.

Son muy diferentes la una de la otra, cada una con su peculiar manera de ser y con gustos propios, y las dos son personas de bien para la sociedad.

Y aunque estén siguiendo ya, cada una, su camino particular, para mí ustedes siguen siendo esas niñas 30 años menores que yo, esas chiquillas que cargué con tanto amor en mis brazos.

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SEGUIRÉ SIENDO EL NIÑO

Óscar Alfredo Perdomo Escobar

Es extraño para mí saber que he rebasado la edad que usted tenía cuando falleció. Y aunque soy más viejo de lo que usted llegó a ser alguna vez, usted sigue siendo el viejo y yo el niño. Y lo miro desde abajo con una nostalgia reverencial, lo veo con admiración, rodeado de un aura de misterio, y lo tengo presente, principalmente, por mi constante lucha por no olvidar su voz y sus facciones. Seguir leyendo «SEGUIRÉ SIENDO EL NIÑO»

LA AMISTAD

¿Cómo definir la amistad?

Quizás la mejor manera de definir la amistad, es decir que un amigo es aquel que se alegra cuando algo bueno te pasa.

Un amigo es aquel que te apoya durante los tiempos difíciles, es aquél al que le podés contar todo sin que se resquebraje la comodidad de estar junto a él (o ella).

Una amistad verdadera se mantiene sólida a pesar de la distancia y el tiempo.

Ahora bien, cuando esa amistad es además una hermandad, eso es algo bello.

Gracias, Wendy. Gracias, Mario.

 

Escrito por

Óscar Perdomo León

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DIBUJO EN EL OCASO

 

Aguacero

Ella caminaba por el pasillo de un supermercado. De pronto, en la fila de la caja para pagar, vio a un sujeto que le pareció conocido.  Caminó hacia a él y le habló, al mismo tiempo que tocaba su espalda:

-Don Jorge.

El sujeto giró hacia ella y sonrió. Ella tuvo una reacción inmediata de avergonzado asombro. Él le extendió la mano y ella le correspondió con la suya, mientras sonreía sonrosada.

-¿Cómo estás?

-¡Disculpá!   Te confundí con alguien. Estoy bien, estoy bien.  ¿Y vos cómo estás?

Habían sido novios durante dos años y habían pasado trece años desde la última vez que habían hablado. Seguir leyendo «DIBUJO EN EL OCASO»

DESEOS POST-MORTEM

La muerte de uno mismo es un tema grande e importante del que a veces no nos gusta hablar; mas todos debemos en algún momento enfrentar esa conversación con alguien o, definitivamente, con uno mismo.

Afortunadamente aún estoy vivo y puedo seguir disfrutando y sufriendo esta vida. Pero, como ustedes muy bien saben, doña Muerte es una señorona muy caprichosa que nunca da aviso de la fecha y la hora exacta de su visita; por esa razón he escrito estos Deseos Post-Mortem.

Los pedidos que hago son simples; pero son también muy importantes. Si quieren de verdad honrar mi memoria las personas que me aman o tienen algún afecto hacia mí,  les pido que cumplan los siguientes requerimientos. Éstos los he escrito un 31 de julio de 2017, en pleno uso de mi razón y de mis derechos como ser humano. Seguir leyendo «DESEOS POST-MORTEM»

NADA HA SIDO MÍO

 

Nada ha sido mío.

 

Hay un sordo resplandor que late y me susurra que sólo un abrir de ojos ciegos es la vida.

 

Inspiro oxígeno y exhalo palabras. Un eco lejano me dice que la vida y la muerte son dos caras de la misma moneda.

 

Sólo la poesía ha podido hacerme entender que existe la grandeza humana y que en la oscuridad unos versos de Ricardo Lindo o de Borges pueden ser un consuelo y una luz. Seguir leyendo «NADA HA SIDO MÍO»

SOY DESAFINADO

Sí, lo sé. Soy desafinado.

Y por eso mi vida se tuerce por recodos que pocos recorren y soy «raro», como me lo dijo alguien. Mi corazón no logra mezclarse y sentirse cómodo en este mundo y su maldad.

Soy desafinado porque mi falta de musicalidad se compensó con el amor inmenso que tengo para dar.

Soy desafinado porque un señorón caprichoso -que muchos dicen que existe-, un señor «todopoderoso» que, sordo y ciego, no atiende el clamor de nadie y permite las masacres y las violaciones de niños y niñas en todo el mundo, quiso que yo no fuera cantante.

Pero me río en la cara de todos y canto, porque me hace feliz.

Por eso, cierren las ventanas y las puertas. Y pónganse algodones en los oídos. No me importa.

Siempre hay un lector para cada libro, una canción para cada oyente y un abrazo abierto para quien lo quiera.

Escrito por

Óscar Perdomo León

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LOS CUERUDOS

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En El Salvador se le conoce como “cueruda” a aquella persona que aguanta con estoicismo –y hasta con cierto cinismo- todo lo que le pueda ocurrir, como el dolor, las regañadas, las vergüenzas…  Pero más allá del tinte peyorativo que pueda tener esa palabra, hay que ver que muy en el fondo el ser cuerudo denota tener valor y resistencia.

Habiendo aclarado el concepto “cuerudo”, les voy a contar que tengo unos amigos y amigas con quienes hemos formado el grupo Los Cuerudos. Nos reunimos a platicar, a contar chistes, a escuchar y tocar música, a jugar baloncesto… Seguir leyendo «LOS CUERUDOS»

EL ADIÓS

Pretty woman

Hay una escena en la película Pretty Woman donde Richard Gere le devuelve un collar muy caro y hermoso al gerente del hotel (Héctor Elizondo). Julia Roberts, quien había iniciado con Gere una relación de negocios que se fue haciendo romántica, acaba de irse y es ya casi el final de la película. (Quien haya visto este largometraje de 1990, entenderá mejor de lo que les hablo.)

Cuando el gerente recibe el collar le dice, mirando a los ojos a Richard Gere:
-Debe ser muy difícil separarse de una joya tan valiosa.

Héctor Elizondo
Héctor Elizondo

Las palabras de Elizondo (que aquí no son literales, pero creo no alejarme de su esencia) son en verdad una metáfora en ese contexto. En realidad él le habla tácitamente de Julia Roberts.

Entonces Richard Gere se queda pensando y sale en busca de ella. Seguir leyendo «EL ADIÓS»

HÉROES ANÓNIMOS

Riñón

En el mundo hay muchas personas que viven luchando cada día, cada minuto, con una enfermedad crónica. Los otros, los que viven en general sanos, no entienden en profundidad lo que significa levantarse cada mañana para emprender una batalla contra la muerte. Las personas que padecen de una enfermedad crónica, como la Insuficiencia Renal, sí lo saben; estas personas tan valientes, que viven sus vidas con alegría, son personas que nos inspiran, que nos trasmiten sus buenas vibras, que nos dan fuerza para seguir adelante. Estas personas son verdaderos héroes anónimos.

A mi hija Beatriz se le realizó este fin de semana un trasplante de riñón. Ayer por la mañana desayunó dieta líquida y estaba con muy buen estado de ánimo. Mi hija no se rindió nunca. Mi hija es una heroína.

Gloria, la mamá de Beatriz (y ex esposa mía) fue sometida a una operación que ella no necesitaba; pero fue intervenida voluntariamente porque su amor de madre es grande y por eso le regaló uno de sus riñones a Beatriz. Gloria le ha dado la vida a Beatriz por segunda vez. Ese sacrificio, en vida, no lo hace cualquiera. Se sometió a un riesgo quirúrgico por su hija. Ella también es una heroína.

Lo anterior que he escrito es breve y se lee fácil, pero el camino que madre e hija recorrieron para llegar al día de la operación fue largo y tortuoso.

Esta semana quiero dedicar mi admiración y mi blog a estos dos grandes seres humanos del sexo femenino, a estas dos heroínas que ahora están unidas por un amor infinito, y por un grandioso y maravilloso riñón.

Escrito por

Óscar Perdomo León 

DOS POETAS, DOS RECUERDOS

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DOS POETAS, DOS RECUERDOS

NIÑEZ

Cuando era un niño de apenas 8 ó 9 años, me aprendí el poema «Ascención», de Alfredo Espino. Y los recitaba y lo recitaba a mi mamá y a mis hermanos y al aire, a quien quisiera o no quisiera escucharlo…

Ese recuerdo trae consigo una cascada de memorias de mis primeros pasos en mi pueblo.

A esa edad raramente podía salir a caminar lejos de la zona urbana de mi ciudad. Sin embargo, un día me dieron permiso de salir con mis primos que, a mi manera de ver, eran a su corta edad ya unos grandes conocedores del territorio urbano y rural del municipio. Fue así que conocí una finca cercana. Ahí nos divertimos mucho. Las imágenes bucólicas de ese viaje que aparecen en mi mente se relacionan muy bien con los poemas de Espino. Y todo ese colorido, los olores, las plantas, los animales del campo, todo ha quedado muy cerca de mi corazón.

ADOLESCENCIA

En mi adolescencia leí un libro que me impactó mucho: «Desde la sombra», de Rafael Góchez Sosa. Creo que su magia consistía en la manera tan sin pose en que estaba escrito; sus versos rebosaban de sinceridad y carecían totalmente de petulancia.

En esos días escuchaba mucha, mucha música y mis ojos miraban el conflicto armado salvadoreño con ojos de esperanza; creía de verdad que el país cambiaría y se convertiría en una gran fuerza de justicia en América. Aún lo creo, pero de una manera diferente.

Al pasar de los años, he visto como la democracia, a paso de tortuga,  se ha ido instalando en nuestro país, ¡pero nos falta tanto!

La música, que es infinita y bella, como lo he constatado con el pasar del tiempo, con sus muchos y tan variados géneros, navega en mí como los glóbulos rojos, en cada vena y cada arteria de mi cuerpo.

Y los poemas de Góchez Sosa aún suenan en mi cabeza.

En el parque viejo

«Parque Viejo», del viejo pueblo que me vio nacer.
Texto:

Óscar Perdomo León

Fotografías:

Érika Valencia-Perdomo

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Fotografía de arriba: volcán Chingo.